"Lamentablemente como nos viene acostumbrando, Ferraresi miente", afirmó el líder de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (FESIMUBO) y dirigente oriundo de Avellaneda, históricamente enemistado con la gestión de Baldomero Álvarez de Olivera y la actual encabezada por el reelecto jefe comunal, que le dio la espalda al sector.
El enojo pasa porque, a partir de la enemistad, el Intendente local comenzó a distanciarse de los municipales históricos y -en cambio- apañar a un nuevo gremio, minoritario en cantidad de afiliados.
Ferraresi impulsó el convenio colectivo de trabajo con el sector que permitirá el cumplimiento del nuevo régimen laboral y la instrumentación de las paritarias, que está en esa ley. Pero Jorge Ferraresi incluyó a gremios como UPCN en la mesa de negociaciones, cosa que despertó el malestar de la FESIMUBO, por entender que estos últimos no tienen representación.
"Fuimos pensando que se podía producir un buen diálogo, pero ahí nos enteramos que estaba invitada UPCN Provincia de Buenos Aires, que no tiene la representación de los trabajadores de Avellaneda, ya que nuestro gremio tiene la personería gremial desde 1968", manifestó Rubén García, secretario general de la FESIMUBO.
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